Portugal y los hijos de meretriz
Las ciudades españolas cercanas a la frontera lusa tienen una población gemela en Portugal, con la que tiempo ha batallaban en pos de abarcar mayor territorio. Ciudad Rodrigo, verbigracia, es la ciudad gemela de la portuguesa Almeida.
Estas ciudades gemelas comparten historia, armas, campos de batalla y miles de muertos que fallecieron por defender al rey de turno. El hecho es que, hoy en día, las ciudades españolas de la frontera han ganado la batalla económica. Me explico.
Me cuenta un profesor de una de estas ciudades que la mayor parte de sus alumnos son unos hijos de prostituta. En efecto, como la prostitución es ilegal en Portugal, se fletan miles de autobuses para ir a los lupanares de las ciudades gemelas españolas donde las casas de alterne se muestran sin pudor alguno en las calles más céntricas. El ejercicio del amancebamiento de prepago ha resultado en un florecimiento económico de la zona española.
Por muy hijos de meretriz que sean, los alumnos de la frontera son encantadores, y toman la profesión de su mamá como algo normal. Además, son sus madres quienes levantan la economía de la región aprovechando la debilidad moral del portugués.
Quizá ahora los españoles fronterizos no estén matando personas sino destruyendo familias, pero eso es harina de otro costal.
Estas ciudades gemelas comparten historia, armas, campos de batalla y miles de muertos que fallecieron por defender al rey de turno. El hecho es que, hoy en día, las ciudades españolas de la frontera han ganado la batalla económica. Me explico.
Me cuenta un profesor de una de estas ciudades que la mayor parte de sus alumnos son unos hijos de prostituta. En efecto, como la prostitución es ilegal en Portugal, se fletan miles de autobuses para ir a los lupanares de las ciudades gemelas españolas donde las casas de alterne se muestran sin pudor alguno en las calles más céntricas. El ejercicio del amancebamiento de prepago ha resultado en un florecimiento económico de la zona española.
Por muy hijos de meretriz que sean, los alumnos de la frontera son encantadores, y toman la profesión de su mamá como algo normal. Además, son sus madres quienes levantan la economía de la región aprovechando la debilidad moral del portugués.
Quizá ahora los españoles fronterizos no estén matando personas sino destruyendo familias, pero eso es harina de otro costal.
0 comentarios