Blogia
Vida de profesor

Por fin en Teherán

Ayer jueves fue uno de los días más estresantes. Conduje 200 km para estar en la Embajada de Irán en España porque se suponía que podría estar mi visado. Este suponer era demasiado para mí, ya que estuve muchas semanas, si no meses, tras él, pero siempre faltaba una carta de alguien importante de Teherán. Ayer yo me presenté a la desesperada, con un billete de avión para la tarde y con el riesgo de no poder impartir las clases que empiezo mañana sábado.

Tras una negativa más a darme el visado, la maquinaria diplomática española desde Irán se puso en marcha y en cuestión de tres horas largas yo ya tenía el dichoso papelajo pegado en mi pasaporte.

No es fácil recibir un visado para Irán, los asuntos de viajes a estos países de medio orienteestán muy cumplicados. Al menos ya estoy aquí y como tengo conexión a Internet desde mi fabuloso apartamento podré ir contándoles algunas de las cosas, principalmente relacionadas con el mundo de la educación, que vayan ocurriendo en este apasionante y difícil país. Les dejo con las primeras fotografías.



1 comentario

Carmen -

Estimado Rafael:

Soy profesora en Brasil y he utilizado tus fotos en mis clases de español para romper tabúes que existían con respecto a Iran. Ha sido una experiencia fantástica. Te confieso que la primera sorprendida con algunas de las cosas que contabas fui yo.

Llevo varias semanas siguiendo tu web y, francamente, estoy gratamente sorprendida con lo activo que eres y lo bien que te has adaptado a un país que, podría parecer inhóspito, en principio, para un occidental.

Enhorabuena

Carmen